Impsat invirtió U$S 2 millones para el desarrollo de telefonía IP

Impsat anunció una inversión de U$S 2 millones en el desarrollo de su red NGN (Next Generation Network) que permite la convergencia de voz y datos en una única red, para brindar servicios IP.

17/08/2005 - Impsat, compañía proveedora de servicios integrados de telecomunicaciones en Banda Ancha, Data Center, Telefonía e Internet en Latinoamérica y Estados Unidos, anunció una inversión de U$S 2 millones en el desarrollo de su red NGN que permite la convergencia de voz y datos en una única red, para brindar servicios IP.

Con esta red, Impsat ya ofrece a sus clientes una amplia gama de servicios basados en IP lo que les permitirá obtener una mayor flexibilidad de uso y una disminución de costos. Dentro de la oferta de servicios IP, la telefonía IP es el más novedoso y requerido por el mercado. El usuario puede acceder a su propia línea telefónica para realizar y recibir llamadas desde cualquier lugar del mundo, a través de internet. Las llamadas mantienen la misma calidad en la comunicación, pero con un costo mucho menor, ya que la voz corre por una única red convergente (NGN). El desarrollo de internet, la proliferación de la banda ancha y la convergencia de voz, datos y video son factores que impulsaron el desarrollo de este servicio.

Impsat implementó este servicio por primera vez en Argentina y cuenta hoy con más de de 200 clientes con esta tecnología.

“En Impsat estamos convencidos de que el desarrollo de la tecnología IP en la región será muy importante y pretendemos ser pioneros en la adopción de esta tecnología de vanguardia para ofrecerla a nuestros clientes. Si bien mantenemos nuestros servicios con la red TDM, el futuro está en la tecnología IP y hoy Impsat la acerca a sus clientes” comentó Antonio Casucci, Vicepresidente Senior de Telefonía de Impsat.

Esta red de próxima generación le permite a Impsat fortalecer su posición dentro del mercado corporativo. A su vez, puede abordar otros segmentos de mercado, como PYMES, SOHO (small office home office – pequeñas oficinas hogareñas) y residencial, ya que los costos son más bajos y se puede integrar más de un servicio sobre el mismo backbone y el mismo acceso.

Cada segmento del mercado presenta problemáticas que deben tener una respuesta adecuada para sus necesidades. Mientras que el segmento residencial se orienta casi exclusivamente a costos, las PYMES buscan además de una ventaja en ese sentido, la posibilidad de contar con servicios que no requieran grandes inversiones y que les permitan ganar en productividad y eficiencia ya que el nivel de competitividad en este segmento es un factor crítico. Por último, para las grandes empresas, que ya realizaron grandes inversiones, el reemplazo de sus servicios requiere una migración adecuada en distintas etapas.

Impsat tiene previsto lanzar este servicio en Brasil y Perú a fines de 2008.

Google Docs se acerca todavía más a Microsoft Office

Vale que Google Docs cada vez tiene más herramientas de edición, formato y vista. Vale que desde hace poco incluye un programa para hacer presentaciones (como el PowerPoint). Pero hasta ahora, Microsoft siempre podía defenderse con que Google Docs sólo funciona a través de Internet. Hasta ahora. Porque la alternativa gratuita a Microsoft Office podrá usarse a partir de este mes sin estar conectados a la Red. Es decir, se podrán abrir, editar y guardar los archivos en el ordenador.

Sin estar conectados a Internet. Vamos, como Microsoft Office. O mejor que Microsoft Office en dos temas muy importantes: es gratuito y cada documento se sincroniza automáticamente, él solito, con la copia almacenada en Internet. Es decir, que si viajamos en avión, no tenemos acceso a la Red o simplemente nuestro router sufre algún problema, podemos trabajar en el ordenador y cuando recuperemos el acceso a Internet, el documento se guarda automáticamente en nuestra cuenta de Google Docs.

Esta última novedad es posible gracias a la herramiente Google Gears, que permite usar aplicaciones desde nuestro navegador web aunque no estemos conectados. Ella se encarga de que, si perdemos la conexión, podamos seguir modificando nuestros documentos, guardándolos en el disco duro del ordenador. Al recuperar la conexión, sus versiones online se actualizan automáticamente.

Eso sí, al estar en fase beta tiene algunas limitaciones: sólo funciona con documentos de texto y está restringido a unos pocos usuarios a modo de probadores, con la interfaz en inglés. Durante este mes de abril Google irá aumentando el acceso a más usuarios, idiomas y tipos de archivo, así que de momento sólo podemos dejaros este vídeo demostrativo (en inglés, por supuesto).

NextGen PC Design Competition, el ordenador en la pulsera

Este año algunos finalistas del concurso NextGen PC de Microsoft llevan la portabilidad al extremo, hasta el punto de integrarse casi como prendas de vestir. Es el caso del collar Momenta y otros tres ordenadores conceptuales que no se enroscan al cuello, sino a la muñeca. FluxPC, INFO Live y Heartfarer son auténticos ordenadores de pulsera con muchos puntos en común, pero también algunas diferencias.

Flux PC consta de dos piezas que se complementan a la perfección: una pulsera y una pantalla enrollable, que podrían cargar sus baterías por contacto (inducción) al ser depositadas en un plato especial. La pulsera sería el dispositivo de almacenamiento y control, con toda su superfice recorrida por una pantalla OLED plegable y táctil. La pantalla enrollable, que se comunica con la pulsera de forma inalámbrica, vendría a ser un pequeño monitor de apoyo, con cámara incorporada para tomar fotos y vídeos.

La superficie de la pantalla también es táctil, y la pulsera, que podría cambiar de aspecto externo a nuestro gusto, también reconocería nuestros movimientos (por ejemplo, un giro de muñeca desactivaría la alarma del despertador). El concepto INFO Live, en cambio, estaría formado por dos pulseras: una para almacenar la información (inforbar) y otra para gestionarla (databar).

El funcionamiento de este sistema sería más sencillo. Ambas pulseras también tendrían una superfice táctil, llena de sencillos iconos para gestionar fotos, vídeos o el correo electrónico, pudiendo transferir los archivos a otros equipos (como un ordenador convencional) de forma inalámbrica, o funcionar a modo de mando a distancia universal para todos los aparatos del hogar.

Y en tercer lugar tenemos el concepto de la pulsera Heartfarer. Su diseño y aplicaciones son muy parecidas a las anteriores, pero tiene algunos rasgos distintos. Por ejemplo, al quitárnosla de la muñeca podríamos estirarla para convertirla en cámara (hay que ver lo que se parecen estos diseños al del Nokia Morph), y también podría geolocalizar las fotos, al disponer de un receptor GPS integrado.

También podríamos personalizar su aspecto externo como quisiéramos, colocando tramas e imágenes como fondo de pantalla (bueno, de pulsera).

Lo sabemos: todo esto suena a pura ciencia ficción. Pero, al fin y al cabo de eso se trata, ya que son candidatos de un concurso de diseño futurista en el que las posiblidades reales de llegar a ser fabricados poco importan. En próximos artículos os hablaremos de algunos finalistas más.

Más info: Next-Gen PC Design Competition

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Siafu, un prototipo de ordenador con pantalla tridimensional para invidentes

Los invidentes y las personas con serios problemas de visión son los que tienen más complicado lo de acceder a las nuevas tecnologías. Jonathan Lucas es consciente de este problema, y para solventarlo se presentó al concurso de diseño de ordenadores NextGen con este Siafu. Se trata de un prototipo de ordenador especial que facilita la interactividad de los invidentes a través de una pantalla-teclado táctil. Un sistema que permitiría incluso tocar las imágenes y los contenidos visuales. Aunqu, como decimos, de momento se trata sólo de un simple prototipo.

En este modelo conceptual nada es convencional. En lugar de usar una torre, un monitor, un teclado y demás periféricos, el Siafu se reduce a una simple tableta de 31 centímetros de largo por 51 de ancho y menos de 2 centímetros de grosor. La mayor parte del aparato está ocupada por la pantalla especial que, en teoría sería capaz de convertir inmediatamente cualquier texto al lenguaje braille, con todas las posibilidades que ello conlleva. No lleva teclado porque dispone de un sistema de reconocimiento de voz que escribe al dictado.

Con este ordenador, las personas ciegas no sólo podrían usar programas informáticos y navegar por Internet. También podrían sentir las fotos y los gráficos gracias a una tecnología que convretiría las imágenes de dos dimensiones en relieves y figuras tridimensionales.

Con este artilugio ya no harían falta esas opciones de accesibilidad de Windows que, aparte de ponerlo todo en tamaño gigantesco y con colores llamativos, no hace mucho más.

Considerando todas sus ventajas, el mayor inconveniente del Siafu es que se trata de un simple proyecto. Su funcionamiento está basado en un material llamado “magneclay” (que puede traducirse grosso modo como “arcilla magnética”) que ni siquiera existe. Lo que significa que su comercialización todavía está muy lejos.

De momento, no pasa de ser un concepto que podría servir de inspiración para que la industria recuerde que aún queda mucho por hacer en esto de acercar los avances tecnológicos a todo el mundo.

Vía: Tuvie

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Los conductores daneses podrán llenar el depósito con energía eólica

Dinamarca tiene un problema, genera demasiada energía eólica. En la actualidad, este país obtiene el 20% de su consumo eléctrico total del viento. En días ventosos, ese porcentaje se puede doblar. Los vaivenes de la energía eólica pueden saturar la red eléctrica. En el oeste de Dinamarca, el precio de la electricidad puede caer a cero en los días ventosos, lo cual deja a varias instalaciones eléctricas descargando a toda prisa el exceso energético para no sufrir este impacto financiero. Para solucionar este problema, la compañía eléctrica danesa Dong Energy planea construir un sistema nacional de recarga de coches eléctricos para poder aprovechar los excedentes energéticos.

Para ello se han asociado a una compañía de lanzamiento (o start-up) califoniana llamada Project Better Place, y juntos planear construir en el año 2010 la infraestructura que de apoyo a todo un sistema nacional de coches eléctricos, con puntos de carga y localizaciones para el cambio de batería diseminados por toda Dinamarca.

“Los coches son la pareja perfecta para la energía eólica”, comenta Shai Agassi, director de Better Place, que en la actualidad planea desplegar una red similar en Israel en asociación a Renault y Nissan, junto a los que construirá vehículos en serie totalmente eléctricos que funcionen con baterías ión-litio. “Las baterías se cargarán por la noche, cuando los coches duermen en el garaje y existe poca demanda de electricidad”.

Dong que lleva años viéndoselas con la intermitencia del viento, tiene abundante tarea gracias a la petición que le han trasladado desde el gobierno danés para que expandan la producción eléctrica de su red con energías renovables hasta el 30%, lo cual deberán conseguir en el año 2025. “Es un reto de dificultad creciente para nosotros”, comenta el consejero delegado de Dong Anders Eldrup. “Tebenis que hacer más flexibles nuestras plantas tradicionales de combustibles fósiles. De ese podo podremos ralentizar su funcionamiento, o incluso detenerlo, cuando el viento sople”.

Además de modernizar las viejas plantas, Dinamarca ha tendido conexiones más fuertes con las cercanas Alemania, Suecia y Noriega de modo que puedan venderles los excesos en la producción en días ventosos. Cuando en Dinamarca hace viento, países como Noruega compran electricidad barata con la que complementar sus propios recursos hídricos. En días muy ventosos, casi la mitad de la producción eólica danesa se exporta a Noruega y Suecia, donde en muchos hogares la calefacción es eléctrica.

“Queremos seguir invirtiendo fuertemente en la red para asegurarse de que podemos transportar la electricidad eólica a donde y cuando sea más necesaria”, comentó Peter Jorgensen, vicepresidente de Energinet.dk, la compañía estatal sin ánimo de lucro que gestiona la red eléctrica danesa.